Este es una de las dolencias con las que suele relacionarse la ingesta de este macronutriente. De hecho, todavía le será fácil encontrar mediante Google unas cuantas páginas que siguen planteando la posibilidad de esta relación en webs supuestamente prestigiosas . Pero los estudios recientes la descartan y este último meta-análisis no es excepción.
Estas son a las conclusiones a las que llega:
- Estudios observacionales (12): Encuentran una pequeña relación inversa entre ambos factores (más proteínas = menos tensión arterial) o ninguna relación.
- Estudios de intervención (17): No se encuentra relación entre el consumo de proteínas y la hipertensión.
Conviene recordar que el meta-análisis se considera el mejor nivel de evidencia científica. Y no es el primero sobre este tema que llega a similares conclusiones.
Pues nada, confiemos en que no tenga que pasar demasiado tiempo para dejar de leer este tipo de acusaciones sin fundamento.
buen análisis, pero cada año en el campo científico siempre se van descubriendo nuevos métodos y descartando los viejos, yo lo veo como una prueba de ensayo y error pro así decirlo. Buen post, felicidades.
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