Lo que dice la ciencia para adelgazar de forma fácil y saludable

3 ene 2021

¿Hay que promover la pérdida de peso para luchar contra la pandemia?


Desde los inicios de la pandemia los estudios epidemiológicos han relacionado la obesidad con la Covid-19, tanto los riesgos de infección, como de los de gravedad y mortalidad. Y, al contrario de lo que ha ocurrido con otros factores, esta relación se ha ido confirmando en sucesivas investigaciones, como las siguientes:
Ante esta evidencia, ha habido bastantes voces, sobre todo del entorno de la nutrición, que reclaman mayor prioridad en la promoción de la  alimentación saludable y más iniciativas para programas de pérdida de peso, como estrategias para combatir la pandemia.

¿Es una petición razonable? 

A continuación voy a exponer brevemente mi opinión. Una opinión personal y discutible, claro.

Desde la perspectiva general, la promoción de una alimentación saludable y la prevención del sobrepeso siempre son buenas estrategias. No solo pueden ayudar a reducir los riesgos de Covid-19, también permitirán combatir los riesgos asociados a otras enfermedades crónicas y a mejorar la salud de la población en general, como puede deducirse de estudios como "Global burden of 87 risk factors in 204 countries and territories, 1990–2019: a systematic analysis for the Global Burden of Disease Study 2019" (2020). Creo que cualquiera que siga este blog conoce el compromiso y convencimiento de su autor por la promoción de este tipo de políticas. 

Pero lo que no está tan clara es su prioridad en esta situación. Ante una situación de pandemia es especialmente importante conseguir con rapidez resultados de gran magnitud, ya que la enfermedad evoluciona desde la infección hasta la muerte muy rápidamente, en tan solo semanas, llevándose vidas por delante, desbaratando nuestra sociedad y colapsando nuestros sistemas sanitarios. Y respecto a las intervenciones para una alimentación saludable y para la pérdida de peso en este contexto, nos encontramos con las siguientes circunstancias:

Falta de evidencia del impacto real: Aunque haya una gran cantidad de estudios que encuentran relación entre al obesidad y los riesgos de Covid-19, todos ellos son observacionales. De momento no se ha realizado un ensayo en el que se haya promovido la pérdida de peso y se haya confirmado la  reducción de infecciones y/o de los casos graves. Y por la dificultad que tiene este tipo de ensayo, dudo que se haga un estudio así en un plazo razonable

Poca efectividad y alto coste en las intervenciones de este tipo: Desafortunadamente, la historia nos muestra que es muy difícil conseguir éxito a medio-largo plazo en una intervención masiva de pérdida de peso. Las escasas experiencias de este tipo han conseguido resultados muy modestos y con un elevado coste (ejemplo). Solo algunas intervenciones con grupos relativamente pequeños, muchos recursos y seguimiento llegan a resultados relevantes a corto-medio plazo y los efectos no suelen mantenerse en el tiempo para la mayoría de los participantes. Por otro lado, el hecho de que la tendencia creciente de obesidad no haya sido revertida por ningún país del mundo es un dato muy significativo y poco esperanzador.

Limitada magnitud de los posibles beneficios: Con los resultados de los estudios observacionales citados al inicio del post podemos hacer una extrapolación de lo que se podría conseguir mediante una intervención de este tipo. No es algo demasiado riguroso, pero podemos hacer el ejercicio. Siendo muy optimistas y en el mejor de los casos podría lograrse aproximadamente una reducción del riesgo de infección del 25% y del riesgo de gravedad a la mitad, en los casos en los que se logren mantener las pérdidas de peso. Pues bien, son valores muy inferiores a los conseguidos durante los ensayos de las primeras vacunas aprobadas, que son hasta 20 veces mejores y además para la totalidad de la población vacunada (estudio, estudio, estudio).

En resumen, sin dejar de ser defensor de las políticas para promover una alimentación saludable y prevenir el sobrepeso, y sin olvidar que durante la situación de pandemia hay que seguir trabajando por favorecer unos hábitos saludables, yo creo que ahora toca priorizar otras estrategias, capaces de conseguir resultados más globalmente, de mayor magnitud y con más rapidez.

1 comentario:

  1. Buen articulo he empezado a trabajar como técnico en dietética y nutrición, y empece a estudiar de nuevo en esta web https://fpformacionprofesional.com/FP-Dietetica-a-distancia-temario.html el curso fp dietética que me pareció que estaría bien pero no sé. Estaría bien hacerlo? que opinan?

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