Lo que dice la ciencia para adelgazar de forma fácil y saludable

30 may 2014

Proteínas y riñones, lo que dice (y lo que no dice) el último meta-análisis

Volvemos a otro de los clásicos en nutrición, la supuesta relación entre el consumo de proteínas y el daño en los riñones. En este caso llega a lo grande, de la mano del estudio "Comparison of High vs. Normal/Low Protein Diets on Renal Function in Subjects without Chronic Kidney Disease: A Systematic Review and Meta-Analysis", que está totalmente accesible. Según algunas interpretaciones, este estudio demuestra que seguir una dieta alta en proteínas puede ser dañina para los riñones.

Veamos si es así, analizándolo en detalle:


El estudio

Se trata de un meta-análisis que ha revisado 30 ensayos estudiando varios indicadores relacionados con la función renal en personas sanas, comparando los resultados obtenidos siguiendo una dieta alta en proteínas respecto a otra baja en proteínas. En concreto los indicadores analizados han sido los siguientes:

Filtración glomerular (GFR): Muestra la cantidad de fluido que atraviesa el riñón, por lo que cuanto mayor sea, mejor se considera que funciona el órgano. Se consideran valores normales por encima de 90 mililitros por minuto y patológicos si son inferiores a 60.

Creatinina sérica: Indica la concentracion de creatinina en sangre, ya que ésta se elimina mediante los riñones. Un resultado normal es de 0.7 a 1.3 mg/dL para los hombres y de 0.6 a 1.1 mg/dL para las mujeres. Valores superiores o inferiores indican diversos problemas de salud.

Albúmina urinaria: Indica la presencia de albúmina en la orina. Los valores normales son de 0 a 8 mg/dL. Si son mayores, significa que los riñones dejan pasar la albumina y no funcionan correctamente.

Ácido úrico: Los valores normales de ácido úrico son 3.4-7.2 mg/dLpara hombres y 2.4-6.1 mg/dL para mujeres. Valores diferentes se pueden asociar con enfermedad renal

pH de la orina: Si los valores están fuera del rango 4.6-8, puede exister un mal funcionamiento renal.

Urea sérica: Es la cantidad de urea, un desecho de la metabolizacion de las proteínas. Sus valores normales son  4.0-8.2 mmol/L, si están por encima muestran un mal funcionamiento de los riñones.

Calcio en la orina: Muestra la cantidad de calcio excretado por la orina. Los niveles normales son de 100–300 mg día. Valores mayores indican un mal funcionamiento del riñón.

Resultados

Este es el resumen de las diferencias, en forma de tabla, para cada indicador


De los 7 indicadores analizados, en cuatro de ellos no se identificaron diferencias estadísticamente significativas (creatinina, albumina, ácido úrico y pH). En los otros tres, las diferencias fueron las siguientes: el valor medio de la filtración glomerular es mayor para las dietas altas en proteínas (algo que normalmente se considera es positivo), el valor medio de urea sérica (estando todos en el rango de la normalidad) es 1,75 unidades mayor para las dietas altas en proteínas y el valor medio del calcio en la orina (también todos dentro del rango de la normalidad) es de 25,4 unidades mayor para el caso de la dieta de más proteínas.

A continuación les muestro las representaciones gráficas de estos tres indicadores:

Filtración glomerular


Urea sérica

Calcio en la orina

Conclusiones

Los autores resumen sus conclusiones con el párrafo siguiente:

La mayoría de estos cambios podrían interpretarse como un mecanismo de adaptación fisiológica inducido por la dieta alta en proteínas y sin relevancia clínica. Sin embargo, teniendo en cuenta el hecho de que la enfermedad renal subclínica es altamente prevalente, y que la obesidad está asociada con la enfermedad renal, los programas de reducción de peso que recomiendan dietas altas en proteínas especialmente de origen animal deben ser tratadas con precaución.

Léanlo detenidamente un par de veces y juzguen ustedes mismos.

En mi opinión, en este estudio se concluye que las diferencias son pequeñas y que para las personas con los riñones sanos, que son la mayoría, todos estos resultados no tienen relevancia clínica y están dentro de los rangos normales. Hay más actividad renal, más filtración y más productos derivados de la metabolización de las proteínas, como no podría ser de otra forma, ya que los riñones están trabajando. Por ello creo que la utilización de expresiones como "sobrecarga de los riñones" no es algo demasiado riguroso, incluso una exageración arbitraria.

Es cierto que habrá que tener precaución con quienes puedan tener enfermedad renal, como un  factor más entre este tipo de enfermos, sin más. Los profesionales serios hacen un análisis previo de los pacientes antes de prescribir cualquier estrategia dietética para detectar posibles patologías, entre todas las que pueden sufrir las personas obesas. Además, queda pendiente que algún estudio valore de forma más detallada el riesgo que podría suponer para enfermos renales estas pequeñas diferencias encontradas entre ambos tipos de dieta. Que yo sepa por el momento nadie lo ha hecho.

Y para terminar, quiero aclarar que ni las proteínas son el demonio, ni comer proteínas a destajo es la panacea. Como expliqué en este post anterior, en el que analicé su relación con la obesidad, las proteínas podrían ayudar a conseguir una dieta satisfactoria aportando saciedad. Por el momento parece que el mayor peligro de priorizarlas en la dieta es que se pueden dejar de comer otras cosas también muy importantes, especialmente vegetales.

Actualización:

Un metaanálisis posterior tampoco encuentra evidencias de que comer más proteínas sea malo para los riñones: Changes in Kidney Function Do Not Differ between Healthy Adults Consuming Higher- Compared with Lower- or Normal-Protein Diets: A Systematic Review and Meta-Analysis (2018)

7 comentarios:

  1. Prácticamente tu conclusión es lo que he logrado abstraer en este tiempo Luis.

    No creo que esos niveles de proteínas sean "peligrosos" per se, pero sí que creo que hay otros motivos para no considerar las dietas hiperproteicas de primera elección: Sostenibilidad, peligro de desplazar de la dieta frutas, verduras, hortalizas...

    Al igual que descarto la peligrosidad a esos niveles, también creo que es necesario atacar con el mismo rigor a las propiedades adelgazantes que se le atribuyen por sí solas.

    Palos desde ambos lados del espectro haciendo cherry picking no ayudan para nada a emitir una conclusión rigurosa.

    Sigamos estudiando

    ResponderEliminar
  2. Este metanálisis es inútil para ver si hay relación entre dietas altas en proteínas y problemas renales. Como muy bien decís el aumento de la actividad renal no se sabe si es algo normal o producirá una insuficiencia renal en el futuro.

    Sería mucho más esclarecedor hacer un metaanálisis sobre estudios prospectivos de consumo de proteínas e incidencia de insuficiencia renal.

    Por mi parte el principio de precaución prevalece. Como dietista titulado no recomiendo las dietas altas en proteínas. Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Totalmente de acuerdo. Un saludo

      Eliminar
    2. ¿Y qué entiendes exactamente por una dieta alta en proteínas? ¿ Cuantos gr x kg de peso?

      Eliminar
  3. Los meta-análisis no sirven para nada. Hay sesgo de publicación.

    ResponderEliminar
  4. que no estés de acuerdo con el metaanálisis (yo tampoco) no significa que puedas afirmar que no pueda ser dañino.

    ResponderEliminar
  5. hay una dieta llamada prokal , me gustaria que alguien la goglee y comente si es buena , es basada en proteinas y vegetales.

    ResponderEliminar