En los comentarios del último post sobre los lácteos se generó un animado debate respecto a su asociación con el posible riesgo de aumento del cáncer de próstata. Como el tema parece generar bastante interés, voy a recopilar más detalladamente en este post la evidencia existente hasta la fecha en estudios epidemiológicos, ya que, como bien apuntaron algunos lectores, en aquel artículo faltaban algunas revisiones y meta-análisis sobre el tema que conviene considerar.
Por ejemplo, en la publicación de 2012 "Evaluating the links between intake of milk/dairy products and cancer" se recopilaron los más significativos que han investigado este tema, quedando resumidos en la siguiente tabla:
Como puede observarse, si bien algunos de ellos no encontraron ninguna relación, son más los que sí la detectaron, aunque con valores de riesgo más bien pequeños-moderados.
Si recurrimos a las revisiones sistemáticas y meta-análisis, estas son las que he encontrado por orden cronológico, incluidas sus conclusiones:
- En 2004 se realizó el meta-análisis analizando los estudios observacionales de caso-control "Milk consumption is a risk factor for prostate cancer: meta-analysis of case-control studies", concluyendo que los consumidores de lácteos presentaban un mayor riesgo.
- La revisión de 2005 "Milk consumption in relation to incidence of prostate, breast, colon, and rectal cancers: is there an independent effect?" no encontró relación consistente entre la ingesta de leche y el cáncer de próstata.
- En el meta-análisis de 2005 "Prospective studies of dairy product and calcium intakes and prostate cancer risk: a meta-analysis" los autores concluyeron que, aunque pequeño (un 11%), parecía haber un aumento de riesgo entre los que más lácteos ingerían, comparados con los que menos.
- En el estudio de 2007 "Milk consumption is a risk factor for prostate cancer in Western countries: evidence from cohort studies" se analizaron los estudios de cohorte (observacionales durante un periodo de tiempo) y se concluyó que las personas que más lácteos tomaban respecto a las que menos tenían un riesgo un poco mayor (13%).
- En 2008 se realizó el mayor meta-análisisis sobre el tema, "Dairy products, dietary calcium and vitamin D intake as risk factors for prostate cancer: a meta-analysis of 26,769 cases from 45 observational studies", incluyendo la valoración de 45 estudios observacionales, sin que se encontrara relación clara entre ambos factores.
- La revisión de 2009 "Milk intake and the risk of type 2 diabetes mellitus, hypertension and prostate cancer" halló resultados contradictorios, por lo que los autores concluyeron que no hay evidencia clara para llegar a conclusiones de aumento de riesgo.
- La revisión sistemática de 2009 "A systematic review of the effect of diet in prostate cancer prevention and treatment" concluyó que un exceso de lácteos puede estar relacionado con un mayor riesgo.
- La revisión comentada al principio del post, "Evaluating the links between intake of milk/dairy products and cancer" de 2012, tampoco halló evidencia sólida de riesgos significativos para un consumo normal de lácteos.
Actualización:
Tras estas revisiones se han publicado un par de metaanálisis más, con los siguientes resultados:
“Dairy products, calcium, and prostate cancer risk: a systematic review and meta-analysis of cohort studies” (2014), los autores encontraron pequeños aumentos del riesgo relativo (entre 7 y 14%) para los mayores consumidores de lácteos, pero no para el consumo de leche entera.
“Dairy products intake and cancer mortality risk: a meta-analysis of 11 population-based cohort studies” (2016), solo se observó un aumento de riesgo de mortalidad por cáncer de próstata asociado a un mayor consumo de leche entera, pero no para el resto de lácteos.
Conclusiones
La evidencia epidemiológica obtiene resultados poco concluyentes y contradictorios. Aunque hay una cantidad significativa de estudios que detectan un aumento del riesgo, dicho aumento es siempre pequeño, con valores similares a los que suelen encontrarse para la correlación entre la ingesta de carne y el mismo tipo de cáncer (como puede comprobarse en este estudio o este otro), por lo que el peligro de la influencia de otras variables no es descartable.
Para que se haga una idea de la dimensión de estos datos, extrapolando los datos de un estudio de 2013 (que concluye un aumento del riesgo del 12%), supone la siguiente aplicación real: La incidencia del cáncer entre los que menos leche tomaron fue de unos 10 casos por cada 100 personas, y entre los que más leche tomaban de 11 casos por cada 100.
Recordando el post anterior en el que hablamos de los estudios relacionados con la salud en general, respecto a el resto de enfermedades allí consideradas (diabetes, hipertensión, otros tipos de cáncer, enfermedades cardiovasculares e incluida la obesidad) los efectos globales de la ingesta de lácteos son claramente positivos, con indiscutibles ventajas para la salud. Por lo tanto, en mi opinión, no hay que despreciar la posibilidad de aumento de riesgo en el cáncer de próstata pero sin obsesionarse, porque el balance global en cantidades normales (unas 2 raciones al día) sigue siendo favorable. Sin duda son necesarios más y mejores estudios que permitan obtener conclusiones con más seguridad. Desde luego, lo que no comparto son opiniones como las de este artículo, en el que un investigador con teorías interesantes en las que profundizar, achaca casi todos los problemas de salud occidentales al consumo de leche.
La leche es un alimento complejo, con multitud de componentes y nutrientes, y por ello es habitual que sus efectos fisiológicos sean múltiples y variados en diferentes personas, por lo que también es importante considerar cada caso particular. Pero insisto, la epidemiología muestra que, en general, tomarlos es saludable.
Una cosa extraña en España es cómo se ha impuesto la gastronómicamente pobre leche UHT en tretrabrik frente a la leche fresca pasteurizada refrigerada. Aquella que aquí antes venía en bolsas y ahora casi siempre en botella, alguna gente la llama "de hostelería", porque es la que siguen empleando en muchas cafeterías, etc.
ResponderEliminarVale que de la UHT se puede comprar mucha de una vez, que la fecha de caducidad de la fresca es más corta, 15 días, pero ¿cuándo nos dura un litro en la nevera? No da tiempo a que se estropee. ¿Y tan poco vamos al supermercado para que no compense comprarla fresca periódicamente? La pérdida de calidad gastronómica de la UHT es tan grande que no merece la pena. Y encima, la fresca es más barata.
¿Hace mucho que no te apetece meterle un buen trago a la leche de la nevera? Probablemente es porque solo tienes leche UHT.
la fresca es más barata??!! ya me dirás dónde... :P
EliminarMarca Leyma por 80 y algo céntimos litro y medio, desnatada, semi o entera. La venden varios supermercados, cambiando céntimo arriba o abajo. Otras marcas, con eso de lo "biológico", etc., disparan el precio, pero esta que digo es económica y mejor que cualquier brik.
EliminarLos productos lácteos tienen muchos beneficios como la presencia de proteínas de alta calidad, vitaminas y calcio. Si desean productos menos pesados, existen los productos desnatados.
EliminarYo andaría un poco justo, hago la compra cada 15 días... Pero me has puesto los dientes largos, a ver si me animo.
ResponderEliminarHola Centinel,
ResponderEliminarmagnífico el blog y el libro, me he enganchado a ambos.
Al hilo de lo que comenta Gerardo, te quería preguntar si existe evidencia científica a favor de la leche entera, sobre la desnatada, tanto con el objetivo de adelgazar como para la salud.
Leo varios blogs paleo, y suelo ver afirmaciones como ésta: (evamuerdelamanzana.com) "Por suerte, parece ser que de un tiempo a esta parte, el uso de los lácteos de calidad se está aceptando de manera más extensa en el “universo Paleo”, y ahora comprendemos que existe una gran diferencia entre los lácteos tradicionales y ricos en vitaminas, y sus malvados hermanastros: los modernos lácteos pasteurizados, desnatados, homogeneizados y alimentados con cereales". ¿Está realmente justificada esta "demonización" de las leches desnatadas?
Un saludo,
Pablo
Me alegro mucho de que te hayan gustado, Pablo.
ResponderEliminarA ver si este post anterior responde tu duda:
http://loquedicelacienciaparadelgazar.blogspot.com/2012/10/la-leche-entera-y-los-lacteos-con.html
Queda bastante claro, muchas gracias.
ResponderEliminarUn saludo,
Pablo
Hola, he leído en varias fuentes que la leche es un alimento insulinémico, que obviamente al consumirla, se disparan los niveles de insulina en la sangre, creando los picos y por consecuencia, el aumento de peso y resistencia a la insulina. Qué hay de cierto en ello?, eso me preocupa un poco, he leído los artículos anteriores y en ninguno mencionan algo con este aspecto¿?
ResponderEliminarSaludos!...
Nacho.
Hola, Nacho. Sí, la leche, al tener azúcares y otros componentes susceptibles, aumenta los niveles de insulina. Pero también otros muchos alimentos, además de los carbohidratos refinados, como por ejemplo las proteínas.
ResponderEliminarSin embargo, el balance global en general sigue siendo favorable. Evidentemente, en función de la sensibilidad a la insulina de tu organismo, la respuesta puede variar bastante, así que deberás estar atento a tu organismo.
prostata
ResponderEliminarHay alimentos que son muy beneficiosos y es una forma casera de poder mantener la prostata sana, con semillas de calabaza o castañas que contienen mucho zinc pero el cuerpo humano no absorbe bien ese mineral. Buscare la cantidad exacta que ahora mismo la desconozco. Saludos
ResponderEliminarInteresantísimo tema la controversia con los lacteos. No entiendo que conspiración los hace tan estigmatizables desde sectores alternativos. Tengo una duda: leo un libro multi-ventas cuya autora ha sufrido y superado un cancer (es médico) que la leche de vaca contiene IGF-1 con lo cual al consumirla se aumenta la actividad de crecimiento celular tumoral. Pero una hormona consumida se metaboliza,no?? no se adhiere directamente al funcionamiento endocrino como un "cortar y pegar", no??.
ResponderEliminarPor favor, por más que he leido y buscado no me aclaran este punto. A ver si fuera posible...
En efecto, el tomar IGF-1 no significa que suban tus niveles de IGF-1, ya que es una hormona que se sintetiza en el hígado. Vamos, parecido a lo que pasa con el colesterol dietético. Pero sí es cierto que el mayor consumo de leche se asocia a una mayor concentración de IGF-1, aunque no se sabe muy bien por qué (podría ser incluso por las proteínas de la leche o por otros mecanismos).
EliminarRespecto a esa señora de las recetas anticáncer, la mayoría de lo que cuenta son falacias. Te recomiendo leer esto:
https://scientiablog.com/2013/10/15/los-13-asombrosas-recetas-anticancer-de-una-medico-y-el-papel-de-los-medios-de-comunicacion/
Saludos... Qué hay de cierto que los productos UHT son perjudiciales para la próstata?
ResponderEliminarTienes la respuesta en el post, la leche que se bebe es UHT
EliminarQue pasaría si uno deja de consumir los lácteos y sus derivados? Son imprescindibles? Saludos
ResponderEliminarConsidero la tematica en discusion muy importante ,que nos ayuda muchisimo pero considero que la leche es de mayor beneficio en la niñez y mas danina en la etapa adulta.el calcio se puede obtener de otra forma
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